Desde hace cuatro años, Sakata Seed Ibérica participa activamente en el Proyecto MujerAGRO, y lo hace bajo un total convencimiento de que el papel de la mujer en el sector agroalimentario no solo debe ser más visible, sino que también tener mayor presencia.
Entrevistamos a Cari Plaza, DIRCOM de Sakata y Miembro de su Junta Directiva, publicada en el nº 1 de la Revista MujerAGRO.
Toda una carrera como periodista en medios de comunicación, y hace cinco años distes el salto a la comunicación corporativa y además agroalimentaria. ¿Qué conocías del sector y cual fue el primer reto al que te enfrentaste?
Tras más de 20 años de experiencia en medios de comunicación generalistas, tenía la información básica del sector, aquella que como periodista conoces por la actualidad puramente informativa. Por eso cuando me incorporé a dirigir el departamento de comunicación y marketing de Sakata tenía claro mi propósito principal: dar voz, visibilidad y valor a un sector infravalorado que tiene mucho que contar. Para ello tenemos que usar las mismas herramientas de comunicación que utilizan en otros sectores, debemos provocar interés, crear contenidos humanos, generar información veraz a la par que atractiva, tener medios económicos y equipos formados porque si no comunicamos dejamos de existir. Entre los primeros retos, conseguir el récord Guinness con el corazón de frutas y hortalizas más grande del mundo en Almería o poner en marcha los Premios Sakata, que ya van por su 5ª edición, para reconocer a periodistas, influencers, chefs, deportistas, etc. que nos ayudan a difundir nuestros valores.
No solo eres directora de Comunicación y Marketing, sino también formas parte de la Junta Directiva de la compañía. ¿Qué papel asumes dentro de él, y cómo es tu relación con el resto de los compañeros, aportas una visión enriquecedora por el hecho de ser mujer?
Sakata Seed Ibérica siempre ha puesto en valor la importancia de la comunicación en su estrategia empresarial. La apuesta por la comunicación es transversal e intrínseca, forma parte de nuestro ADN. Por eso, como responsable del departamento, formo parte del Comité de Gestión de la compañía. Y aunque mi aportación no se rige por sexo, sino por aptitudes, sí que es cierto que en la diversidad está el equilibrio. De momento, soy la única mujer, pero todo llegará. Es cierto que es un sector históricamente muy masculinizado, y todavía existe un techo de cristal que romper; pero soy optimista. Cada vez hay más talento femenino en puestos de responsabilidad intermedios; por lo que con las políticas de igualdad que aplicamos en Sakata, solo es cuestión de tiempo tener a más mujeres en los puestos directivos.
¿Crees que las empresas están siendo conscientes que la comunicación está cambiando, y se debe hablar, comunicar con perspectiva de géneros en el sector?
Es un proceso lento pero que, tarde o temprano, tienen que ir interiorizando las empresas comprometidas con lograr sociedades más igualitarias. Somos los que hacemos, pero también cómo contamos aquello que hacemos. Ahí está el matiz. Fuera de debates políticos, para mi comunicar con perspectiva de género es construir una narrativa congruente, cuyo punto de partida está en la formación en políticas de igualdad. Sólo con conocimiento podremos avanzar.

El equipo de SAKATA con Los Hermanos Torres.
Sakata presentó hace dos años su Plan de Igualdad. Más allá de la obligatoriedad, ¿qué llevó a una empresa como Sakata a dar este paso, y qué objetivos os marcáis con él a medio plazo?
Como he recalcado antes, en Sakata estamos convencidos que el punto de partida es formar para sensibilizar. Por eso, para nosotros el Plan de Igualdad nos marca la hoja de ruta para nuestra estrategia en materia de igualdad. Queremos aportar a todos los empleados y departamentos las herramientas necesarias para fomentar el aprendizaje y desarrollar sus habilidades en este ámbito. En paralelo, la empresa es responsable de aplicar todos los mecanismos que tenga en su mano para conseguir una igualdad real.
Dentro del sector agroalimentario, ¿cuáles son las acciones más urgentes que se deben acometer?
En general, trabajamos para que la presencia de las mujeres en el mercado laboral sea en igualdad de oportunidades. Para lograrlo, ya sea en nuestro sector o cualquier otro, la conciliación y la familia deberían dejar de ser tratados como un problema sólo de las mujeres. Así mismo, es nuestra responsabilidad promover la igualdad salarial, la no discriminación y la promoción a puestos de responsabilidad en igualdad de condiciones. Esto último es una de las grandes asignaturas pendientes del sector; escasean las ‘jefas’ en el campo por la idiosincrasia del sector, pero, poco a poco y con más lentitud de la que debiera, la balanza se equilibrará.
Sois patrocinadores del Proyecto MujerAGRO, ¿qué aporta esta marca al sector, y a Sakata?
En Sakata creemos firmemente en el proyecto MujerAGRO, que hemos apoyado desde que nació. Nuestro compromiso como empresa pasa por apoyar iniciativas como esta, que ayudan a dar visibilidad a todas aquellas mujeres que luchan, muchas de ellas en la sombra, por conseguir un sector más igualitario, uno de los pilares fundamentales de nuestro Plan de Igualdad.