Beatriz García Carrillo asume la Dirección Comercial de Grupo La Caña con un profundo conocimiento del negocio y del sector agrícola, afronta esta etapa con el objetivo de reforzar la cercanía con clientes y productores.
Por Marga López Polo, periodista agroalimentaria
Recientemente ha asumido la Dirección Comercial de Grupo La Caña. ¿Qué supone para usted este nuevo reto profesional?
Es una gran responsabilidad y, al mismo tiempo, una enorme ilusión. He crecido en una familia vinculada a la agricultura y llevo casi diez años en Grupo La Caña, pasando por áreas clave como calidad, marketing y comercialización, especialmente en la línea ecológica. Esta trayectoria me ha dado una visión global del negocio y de las necesidades de agricultores, clientes y consumidores. Mi reto ahora es dar continuidad al trabajo realizado y reforzar nuestra cercanía con clientes y productores, con la innovación, la sostenibilidad y el valor del origen como ejes.
¿Cuál es su hoja de ruta al frente del departamento comercial?
Se centra en tres ejes. Primero, la planificación y adaptación junto a nuestros agricultores para garantizar un suministro estable, seguro y rentable en un contexto incierto. Segundo, la comunicación y la transmisión de valor añadido hacia nuestros clientes, poniendo en relieve nuestros esfuerzos en sostenibilidad, innovación y calidad.
Y tercero, la consolidación de equipos: contamos con un grupo humano cohesionado y mi compromiso es seguir implicándolos y sacando lo mejor de cada persona. En este punto, quiero destacar el trabajo de nuestros agricultores y del equipo humano de Grupo Grupo La Caña. Ellos son la base de nuestro proyecto.
Nuestro compromiso es darles estabilidad en un entorno complejo y seguir ofreciendo al consumidor frutas de calidad, seguras y sostenibles. Todo ello alineado con el plan estratégico del grupo: crecimiento sostenido, innovación en genética, biotecnología y digitalización, y proyectos de economía circular como Caña Nature.
¿Qué previsiones de campaña manejáis para aguacate, mango y chirimoya?
En aguacate prevemos entre 13 y 14 millones de kilos, gracias a la diversificación de fincas y variedades. En mango, tras un 2024 muy corto, esperamos una producción nacional de 30.000–35.000 toneladas, y en nuestro caso entre 1 y 2 millones de kilos de fruta de proximidad y excelente calidad. En chirimoya mantenemos una posición sólida, aunque con un mercado más estable y limitado que el aguacate o el mango.
¿Cuáles son los principales retos en la comercialización de estas frutas?
Nos enfrentamos a la competencia de Marruecos en aguacate, a los efectos de la climatología extrema y al incremento de los costes logísticos y productivos. Nuestra respuesta es poner en valor la proximidad, la calidad, la seguridad alimentaria y las certificaciones, garantizando regularidad y confianza.
¿Qué papel juegan innovación y sostenibilidad en la estrategia comercial?
Son pilares estratégicos. Innovamos en mejora genética, bioinsumos, digitalización, polinización y economía circular, con proyectos como Green Motion, REALM o Smartbiofert. En sostenibilidad, hemos sido evaluados por SGS en nivel de “Madurez” y avanzamos en reducción de huella hídrica y de carbono, residuo cero y economía circular a través de Caña


